Ataban a las personas a la cama en hogares de ancianos

7 diciembre, 2016

Señalaron al asilo Beit Reuven de Jerusalén
Se encontró que en más de 20 hogares de ancianos del país rutinariamente amarran a los residentes en la cama o a sillas, en violación de las normas y procedimientos establecidos, según un reciente estudio del Ministerio de Salud.
El informe dice que en varias instalaciones más de la mitad de las personas mayores permanecen atadas, mientras que en otros hubo incidentes en los que fueron lesionados al emplear estas técnicas perjudiciales.
En el informe se señaló al hogar de ancianos. Beit Reuven, en Jerusalén, un asilo en el que viven enfermos de Alzheimer, donde se encontraron a los ancianos atados a sillas y a sus propias camas durante gran cantidad de horas. Cuando se increpó a las autoridades del lugar alegaron que lo hacían en beneficio de los pacientes, para que no se caigan ni se lesionen a sí mismos ni a los demás. Pero esta explicación no disipó la preocupación de los miembros de la familia.
Una mujer le dijo a Radio Israel que estaba “sorprendida” porque durante su visita a Beit Reuven, descubrió que su madre estaba atada a la cama de tal manera que no podía moverse y bajo sufrimiento. “Ella no podía moverse”», dijo la mujer que habló en condición de anonimato, diciendo que temía que quejarse en público pudiera afectar peor el tratamiento que recibe su madre. “Podía respirar, sentía su aliento, pero nada más”, dijo ella, cuestionando el por qué esas prácticas todavía se usaban cuando existían otras alternativas, como los sedantes.
La mujer dijo que debido a la escasez de instalaciones en Jerusalén que se ocupan de personas mayores con Alzheimer, no tiene otra opción que dejar a su madre en Beit Reuven a pesar de haber descubierto la forma en que tratan a los internados.
Después de una visita sorpresa a la instalación, el Ministerio de Salud ordenó a Beit Reuven cambiar el equipo que utiliza y cambiar sus prácticas, al tiempo que convocó a su administración para una audiencia sobre el tema. Además de Beit Reuven, docenas de instalaciones en todo Israel fueron criticadas por prácticas similares, así como por carecer de equipo adecuado, tales como sillas de ruedas y equipo para restringir a los residentes de manera segura cuando sea necesario de una manera que no conduzca a lesiones y vejaciones.

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