Jason Bourne (EE.UU. 2016) Dirección: Paul Greengrass. Guión: Paul Greengrass, Christopher Rouse. Fotografìa: Barry Ackroyd. Actores: Matt Damon (Jason Bourne), Tommy Lee Jones (Robert Dewey director Alicia Vikander (Heather Lee), Vincent Cassel (Asset), Julia Stiles (Nicky Parsons), Riz Ahmed (Asron Kalloor) y otros.
El actor y el director ya han colaborado en películas anteriores de la serie Jason Bourne, ya ha habido tres versiones, fuera de un film donde ni aparecía Jason y este es el cuarto film de ese conjunto que reúne a Damon con Greengrass, que como siempre muestra su maestría en secuencias de acción frenéticas, ensordecedoras. En el transcurso de esa inyección constante de adrenalina, nos lleva a ciudades diferentes en Europa y el mundo, culminando con un espectacular final en Las Vegas. Bourne combina una técnica de alta fidelidad que le permite enterarse cómo es seguido por sus anteriores empleadores con una técnica más bien baja con una predisposición de golpear a sus asaltantes, improvisando con todo lo que venga a mano.
Romperá si es preciso la pata de una mesa y otras proezas por el estilo. Está por revelar una operación secreta de la que forma parte, se trata siempre de asesinatos que se van cometiendo, donde los jefes de la agencia no están seguros de devolverlo a casa o terminar con él. Este nuevo film se puede ver como un resumen de la serie, se parece a las interminables aventuras de 007 James Bond – Al principio Jason no quiere ser percibido peleando con los puños en algunos lugares de Europa, por ejemplo con algunos serbios, por dinero. Nicky, su socia de antaño con tal vez algún interés romántico, va a poner en la red, a la manera de Snowden todos los detalles de su operación personal. Eso llama la atención del director de la CIA, Dewey, que llama a un asesino brutal a intervenir, apodado Asset (se podría traducir no muy correctamente, ventaja) para eliminar al traidor Bourne.
Dewey tiene una subordinada brillante y felina, Heather, que sostiene que se debe convencer al protagonista a entregarse, no a eliminarlo. Ella es contemporánea del colegio de Kalloor, que sería el genial estilo Zuckerberg, que existe a los servicios de inteligencia americanos con una aplicación de invasión ilimitada de privacidad. Todo esto sucede cuando Bourne se va acercando a una verdad personal terrible, el asesinato de su padre, un hombre de la agencia del que creía ser más bien un empleado de escritorio.
Desde que la franquicia Bourne fue introducida al principio de la década anterior, reinventando al héroe de la novela de Robert Ludlum de los años ochenta, en el medio de la guerra contra el terror fue siempre una figura ambigua ideológicamente. El asunto de las revelaciones de Snowden hacen del personaje algo más relevante, pero los ingredientes son básicamente los mismos. Hay un nivel más alto de sofisticación digital, los aportes de la era digital son idóneamente puestos en marcha. El casting del film es acertado, han desaparecido los malos anteriores repuestos por nuevos, Damon es un buen actor, versátil, Tommy Lee Jones, es un veterano del cine y un toque de cinismo realza el personaje. Film recomendado para los amantes de la acción intensa, así que menos palabras y a entretenerse durante dos horas. ■