El primer ministro libanés, Najib Mikati, se mostró esperanzado en que se alcance “muy pronto” un alto el fuego entre las Fuerzas de Defensa de Israel y el grupo terrorista chií libanés de Hezbollah, aunque no especificó una fecha concreta.
“Aseguro a los libaneses que su patria no caerá y esperamos que seamos testigos de un alto el fuego dentro de muy poco tiempo”, dijo Mikati en una entrevista al canal de televisión Al Jadeed.
En la entrevista, hizo referencia a sus contactos con el mediador estadounidense, Amos Hochstein, que el pasado 21 de octubre visitó el Líbano y que hoy ha llegado a Israel.
“Me puse en contacto con el enviado estadounidense, Amos Hochstein, en su camino a la región, y esperamos alcanzar pronto un alto el fuego”, insistió antes de calificar el “movimiento” del enviado estadounidense de “una señal de esperanza que espero que conduzca a un alto el fuego”.
Asimismo, Mikati subrayó que “lo que se requiere es un alto el fuego y una garantía estadounidense” y que luego se podrá hablar de los detalles.
Agregó que: “Hochstein me sugirió que es posible alcanzar cosas positivas antes del próximo 5 de noviembre (día de las elecciones presidenciales en Estados Unidos)”.
En este sentido, Mikati aseguró tener un “optimismo cauteloso” e insistió en que las condiciones del Líbano para un alto el fuego son la implementación de la resolución 1.701 del Consejo de Seguridad, que estipula el desarme de las milicias libanesas y la retirada israelí del Líbano, así como el despliegue del Ejército en el sur del Líbano, donde operan los efectivos de la organización terrorista Hezbollah, que de hecho es un satélite de Irán.
“El Ejército necesita equipamiento para desempeñar su papel y no debe haber armas en la zona situada al sur del río Litani, excepto en manos de la legitimidad libanesa”, dijo el primer ministro del Líbano, en referencia a las Fuerzas Armadas.
Dos de los principales asesores de la Administración de Joe Biden llegaron a Israel este jueves para intentar cerrar un acuerdo que ponga fin a la guerra contra Hezbollah en Líbano y permitir a los civiles desplazados de ambos lados de la frontera regresar a sus hogares, informó el medio estadounidense Axios, citando a tres fuentes conocedoras de este viaje.
Los asesores que viajaron a Jerusalén son Amos Hochstein, mediador para el conflicto entre Israel y Líbano, y Brett McGurk, coordinador de la Casa Blanca para Oriente Medio y el Norte de África.
Funcionarios israelíes y estadounidenses explicaron, según Axios, que creen que después de los golpes que ha sufrido Hezbollah en los últimos dos meses, incluida la eliminación de su líder, el jeque Hassan Nasrallah, el grupo terrorista finalmente podría estar dispuesto a llegar a un acuerdo.
Axios recuerda que el primer ministro, Benjamín Netanyahu, convocó una reunión con varios ministros y altos líderes de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) y de los servicios de inteligencia el martes por la noche para discutir el posible acuerdo, según funcionarios israelíes.
Estas fuentes aseguraron que Amos Hochstein estaba esperando, no obstante, que los líderes israelíes decidieran si podían seguir adelante con el acuerdo antes de viajar a Israel.
Y el hecho de que él y Brett McGurk viajaran a Israel sugiere que el titular del Ejecutivo, Benjamín Netanyahu, está a favor de seguir adelante con el acuerdo.
Los funcionarios israelíes indicaron, según el medio especializado, que el acuerdo que se está discutiendo se basa en la reimplementación de la Resolución 1701 del Consejo de Seguridad de la ONU que puso fin a la guerra de 2006 en Líbano.
El acuerdo que se está considerando prevé un anuncio de alto el fuego seguido de un período de transición de 60 días, dijeron los funcionarios.
Durante este período de transición, Hezbollah trasladaría sus armas pesadas al norte del río Litani y lejos de la frontera israelí. El ejército libanés desplegaría unos 8.000 soldados a lo largo de la frontera con Israel, que se unirían a las fuerzas de paz de la FINUL allí, y las Fuerzas de Defensa de Israel se retirarían gradualmente al lado israelí de la frontera. Aurora y EFE