El Gobierno de Israel prorrogó dos meses más, hasta el 15 de agosto, la estancia de los desplazados del sur de Israel en hoteles y alojamientos, donde miles continúan tras el brutal ataque de Hamás del 7 de octubre, informaron las autoridades.
«La decisión tiene también por objeto no perjudicar el proceso de reconstrucción y recuperación de las comunidades y facilitar una integración óptima en el retorno a las comunidades permanentes», dice un comunicado de la Autoridad de Tekuma, organismo encargado de rehabilitar el sur del país.
En torno a un 70 % de los 57.000 desplazados del sur ya han vuelto a sus casas, pero el resto continúan en hoteles subvencionados o en otras comunidades cercanas, a la espera de que sus casas sean reconstruidas.
En algunos de los kibutz (comunidades agrarias colectivistas) más próximos a la divisoria con la Franja, como Beeri, Kfar Aza, Nir Oz o Kerem Shalom, las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) todavía no permiten el retorno de sus habitantes, ya sea por inseguridad -las organizaciones terroristas palestinas de la Franja continúan disparado cohetes al área- o porque siguen siendo inhabitables.
A principios de mayo, el director de la Administración de Tekuma, Moshe Edri, aseguró al canal 12 que los habitantes de Beeri, Kfar Aza y Nir Oz no podrán volver a sus hogares hasta dentro de «dos o tres años».
Entre octubre y noviembre de 2023, unos 125.000 israelíes de comunidades al sur y también al norte del país -próximas a la frontera con el Líbano- fueron evacuadas a raíz de los ataques. EFE y Aurora