Mark Carney, exgobernador del Banco de Canadá y del Banco de Inglaterra, asumió este viernes como el nuevo primer ministro de Canadá, reemplazando a Justin Trudeau, que ya había renunciado al cargo en enero pero que siguió ejerciéndolo hasta que el partido eligió su reemplazo.
Con 59 años, Carney asume como primer mandatario en un contexto complicado, en el que deberá enfrentar tensiones con Estados Unidos. mientras se prepara para una inminente elección general. Se espera que convoque a elecciones generales en los próximos días o semanas, en un clima de resurgimiento del nacionalismo canadiense.
Donald Trump anunció que, a partir del 2 de abril, se impontrá un impuesto del 25% sobre el acero y el aluminio canadienses, y además alertó que esto podría extenderse a todos los productos del país.
Además, sus declaraciones sobre la posibilidad de anexar Canadá como el “estado 51” han generado indignación entre los ciudadanos y han fortalecido el apoyo al Partido Liberal en las encuestas.
Si bien Carney afirmó que está dispuesto a negociar con Trump, advirtió que están listos “para discutir un enfoque común y más integral en materia comercial, siempre que haya respeto mutuo”.
Además, ya conformado un gabinete con figuras clave para enfrentar la crisis, como François-Philippe Champagne, que asume como ministro de Finanzas, y Dominic LeBlanc, que pasa a ocupar el cargo de ministro de Asuntos Intergubernamentales.