Dado el alto número de inmigrantes en el mundo, la Asamblea General de la ONU declaró al 18 de diciembre como El Día del Inmigrante. Ese mismo día, pero una década atrás, la Asamblea adoptó la Convención Internacional respecto a la protección de los derechos de todos los trabajadores migrantes y sus familias. Este es parte del informe presentado por la CBS (Oficina Central de Estadística de Israel) un día antes de conmemorarse el día antes mencionado.
Llegaron al Estado de Israel alrededor de 3,3 millones de inmigrantes, de los cuales el 43,7% emigró desde 1990 en adelante. Esto es posible gracias a la Ley del Retorno vigente.
En 2018, 37.200 nuevos inmigrantes llegaron a Israel: 28.100 inmigrantes (incluye a inmigrantes arribados por motivos de fuerza mayor). Durante los primeros diez meses de 2019 (enero – octubre) 27.300 inmigrantes llegaron a Israel, lo que representa un aumento del 20% durante el mismo período del año pasado.
A fines de 2018, había 106.200 ciudadanos extranjeros en Israel que habían ingresado con la visa desde 2003, que trabajan y aún no han salido del país. A fines del mismo año, la cantidad de turistas que permanecieron en el país después del vencimiento de su visa (probablemente por motivos laborales) es de alrededor de 58,000.
Entre las familias inmigrantes desde la década de 1990 en adelante la proporción de familias de parejas con hijos (de cualquier edad) fue 54% más pequeño que el 58% de todas las familias judías. En contraste, la proporción de familias monoparentales es del 14% y familias de parejas sin hijos 31% (ligeramente más altas que algunas familias judías 13% y 28% respectivamente.
El número promedio de niños menores de 18 años en estas familias es de 2,07, en comparación con 2,37 en las familias judías israelíes. El nivel de lectura de casi un tercio (30%) de los inmigrantes es bajo o no lee en absoluto el hebreo. La mayoría de los inmigrantes están generalmente satisfechos con sus vidas (85%). El 55% dijo estar satisfecho con su situación económica actual. Un poco más de la mitad (52%) dijo que estaban contentos con sus salarios, y el 73% dijo que podían cubrir sus gastos mensuales. En los tres casos que se compararon, los porcentajes fueron inferiores a los de los israelíes nativos. También contiene el informe que la mayoría de los inmigrantes son mujeres (51,1%) y entre 15 y 64 años (69,4%).
Los países de los que más inmigrantes llegaron en 2018 fueron: de Rusia (10.500 personas o 37,2%), de Ucrania (6.400 personas o 22,9%),de Estados Unidos (2.400 personas o 9%) y de Francia (2.400 personas o 8,7%). La edad promedio de los nuevos inmigrantes se encuentra en 33,9 años aproximadamente. Respecto a los israelíes y sus migraciones (salidas de Israel para establecerse fuera del país): entre 1990 y 2017, unos 574.600 israelíes se trasladaron al extranjero y permanecieron allí durante más de un año, un promedio de 20.500 al año. El balance entre los israelíes que emigran y los que regresan es actualmente negativo: de 321.200 israelíes que salieron de Israel, sólo 253.400 regresaron a sus casas.
Alrededor de 106.200 trabajadores migrantes residen legalmente en Israel a partir de 2018, la mayoría de los cuales llegan desde 2003. De esa cifra, el 74% proviene de uno de estos cinco países: Tailandia (23,4%), Filipinas (21,3%), India (11,1%), Moldavia (9,3%) y China (8,9%). El número de migrantes ilegales en Israel en 2018 ascendía a unos 58.000. En 2018, había 33.600 pedidos de asilo y residencias en Israel. La mayoría de ellos procedentes de Eritrea (71%) y Sudán (20%).
Fuente: cbs.gov.il