El primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, sostuvo una reunión con líderes de la comunidad cristiana de Brasil como parte de su visita en el país suramericano para la toma de posesión del nuevo presidente, Jair Bolsonaro.
Durante sus palabras, Netanyahu declaró que Israel no tiene «en el mundo mejores amigos que la comunidad evangélica, y la comunidad evangélica no tiene mejor amigo en el mundo que el Estado de Israel». El mandatario israelí explicó que «si eres un cristiano en el Medio Oriente, sólo hay un lugar donde puedes estar a salvo. Sólo hay un lugar donde la comunidad cristiana está creciendo, floreciendo, prosperando. Ese lugar es el estado de Israel».
Netanyahu recibió fuertes ovaciones del público cuando habló sobre la capital del pueblo judío: «Israel y Jerusalén son uno. Y Jerusalén, desde el tiempo del rey David, 300 años antes del Rey Ezequías, era la capital de nuestro pueblo, ha permanecido como la capital de nuestro pueblo, y seguirá siendo la capital unida y eterna del pueblo judío para siempre».
El mandatario israelí valoró también la situación de las minorías religiosas en Israel diciendo que cuando vienen a Israel hoy en día, «ven un país que les da la bienvenida como hermanos y hermanas. Ven un país que valora la libertad religiosa. Ven un país que se enorgullece de nuestro pasado y lleva nuestros valores al futuro. Ven un país donde el ideal es que cada persona nace a imagen de Dios, la idea original de igualdad».
Asimismo el primer ministro Netanyahu se refirió al nombre del nuevo presidente de Brasil y su origen hebreo: «Yair significa algo en hebreo: El que trae luz (ilumina). Creo que ahora tenemos la oportunidad de dar mucha luz al pueblo de Brasil y al pueblo de Israel. Esta es una alianza de hermanos».
Por último Netanyahu invitó a los cristianos de Brasil a visitar Israel y dijo que ahí serían recibidos de gran forma: «Les daremos la bienvenida con todo el amor y calidez que reservamos para la familia. Ustedes son parte de nuestra familia y nosotros somos parte de la suya».