La “Ley de recomendación” podría proteger a Netanyahu
El pequeño partido centrista Kulanu, encabezado por el ministro de Finanzas, Moshé Kahlon, se había posicionado hasta el momento como el “adulto responsable” que, dentro de la coalición, trataba de proteger la democracia israelí frente a los embates de hostilidad sin precedentes contra el imperio de la ley, liderados por el primer ministro, Biniamín Netanyahu.
Pero a la hora de la verdad, terminó allanando el camino para que se apruebe el “Proyecto de ley recomendación”, promovido por el diputado del Likud, David Amsalem, para prohibirle a la policía que recomiende la imputación del primer ministro -si encuentra suficientes pruebas en los casos de corrupción, por los que está siendo investigado-.
En un principio, el partido Kulanu exigía que la ley no fuera retroactiva (o sea que no se aplicara a Netanyahu); pero ante la inmensa presión del Likud levantó esa bandera. A cambio, logró insertar una cláusula para que se le permita a la policía emitir sus recomendaciones, a pedido del fiscal general; pero que prohíbe que esas recomendaciones se publiciten.
Fuentes políticas señalaron que las recomendaciones sobre los casos relacionados con Netanyahu deberían haberse publicado a mediados de diciembre. Esto explicaría, en definitiva, la histeria que el partido gobernante Likud ha mostrado para que se aprueben lo antes posible estos proyectos de ley.
De hecho, con el toque de Kahlon, la policía podrá seguir emitiendo sus recomendaciones a la Fiscalía (a pedido del fiscal general); pero el público no podrá recibir la información sobre la investigación de Netanyahu, es decir los detalles de los casos de presunta corrupción del primer ministro.