Todo el mundo quiere ir a Israel ¿Por qué?

4 julio, 2018

Por José Ignacio Rodríguez

El verano ya llegó, al menos en esta parte del planeta, decía el estribillo de una de esas típicas canciones de esta época del año donde el tiempo es más caluroso. Los viajes turísticos están alcanzando récord desde que se tienen estadísticas a nivel mundial. Todo el mundo quiere ir a algún sitio, a pasar unos días de descanso, pero especialmente, por una razón o por otra todo el mundo quiere ir a Israel.

En este tiempo de vacaciones, el deseo de cambiar de ambiente genera un movimiento internacional de gente que va de un lugar a otro con la esperanza de dejar atrás el aburrimiento, la insatisfacción y la rutina de todo el año. Las agencias de viajes, las catedrales de los sueños idílicos, nos venden felicidad temporal a precios asequibles que además se pueden pagar en cómodos plazos durante el resto del año.

Los modernos “viajeros del tiempo” quieren trasladarse a otros lugares a muchos años de distancia de su presente realidad. La búsqueda de algo nuevo se ha convertido en el leitmotiv, motivo existencial, de sus vidas ¿Encontraremos algo nuevo que nos haga resurgir de las cenizas de nuestra monótona forma de vida? Si, en Israel con toda seguridad.

Las razones para visitar Israel son muchas tantas como personas la visitan. La entrada al aeropuerto de Tel Aviv ya deja sentir unas expectativas que siempre serán menores que la realidad que nos vamos a encontrar. Un moderno país se abre ante nuestros ojos entornados por la desinformación de la mayoría de los medios de comunicación, que nada tiene que ver con la realidad del moderno Estado de Israel. El tradicional y el moderno Israel conviven en perfecta sintonía que además de abrir nuestros ojos a la realidad del país abre nuestras emociones y sentimientos más arraigados, en nuestro interior.

Un país, que acoge en su seno variadas formas culturales, ideologías y líneas de pensamiento que dibujan un mosaico maravilloso de libertad personal y comunitaria. La libertad sólo tiene forma visible en Israel. Una libertad que permite la convivencia, el progreso, los grandes avances y los grandes movimientos intelectuales o artísticos, por citar unos ejemplos, que hacen de Israel un país único en el mundo. Las palabras son muy limitadas para definir a un moderno Israel que en setenta años se ha convertido en un referente mundial de innovación, progreso y bienestar a nivel mundial. Un ejemplo imbatible de avances en todos los campos que se evalúen. La libertad hoy se llama Israel.

Todo el mundo, amigos y enemigos, están deseando ir a Israel, aunque no por las mismas razones como es obvio. Israel es la única esperanza que les queda a aquellos que huyendo de la guerra en Siria se dirigen hacia las fronteras del país con la necesidad de ser libres de las tiranías crueles que anidan en Oriente, de forma particular, sin excluir otras partes del mundo. Todo el mundo, insistimos, quiere ir a Israel.

Todos los caminos llevan a Roma, dicen algunos, lo que sí es seguro es que todos los corazones llevan a Israel. Una casa emocional de libertad y espiritualidad, para todas las naciones. El viaje de tu vida está por descubrir. Visitar Israel es vivir lo inimaginable.

 

Compartir
Subscribirse
Notificarme de
guest

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

0 Comentarios
Inline Feedbacks
Ver todos los comentarios