Nueva cadena pública anuncia su comienzo el 1 de enero

Altos directivos de la nueva corporación de difusión del Estado, establecida por una ley de la Knéset del 2014 para reemplazar a la Autoridad de Radiodifusión de Israel (IBA)– que arrasta déficit presupuestario-, anunciaron al gobierno que estará lista para su emisión el primero de enero, aunque el primer ministro Biniamín Netanyahu se opone.
La carta aseguró que la programación reflejaría el amplio espectro de la sociedad israelí y dijo que el personal de redacción inicial de la corporación incluye judíos de diferentes creencias religiosas, así como de las minorías, incluyendo los árabes y los descendientes de los inmigrantes judíos de Etiopía, informó el Canal 2 Noticias.
También dijo que la compañía ya ha invertido unos 140 millones de shékels (36 millones dólares) en producciones originales y en el establecimiento de estudios en Jerusalén, Tel Aviv, Modi’in y Beer Sheva en el sur del país.
La carta es una respuesta al anuncio realizado por el diputado del Likud, David Bitan, en los últimos días que planea proponer un proyecto de ley para abolir la nueva emisora pública y dejar intacta – pero más eficiente – a la IBA saliente.
También ejerce presión sobre el primer ministro Biniamín Netanyahu, que también sirve como ministro de Comunicaciones, encargado de regular la nueva agencia. Netanyahu se opone al establecimiento de la corporación y ha argumentado que su lanzamiento debe retrasarse porque puede no estar lista para su difusión hasta 2018.
La legislación, manifiesta por el entonces ministro de comunicaciones Gilad Erdan, que ahora es ministro de Seguridad Pública, garantiza una mayor independencia editorial de la nueva corporación en comparación con la IBA, la exime de las reglas de control estatal que se aplican a la mayoría de las demás corporaciones públicas y restringen severamente la capacidad de los políticos de intervenir en el contenido y el nombramiento de cargos directivos.
En julio, sin embargo, Netanyahu decidió extender la vida de la actual IBA y retrasar el lanzamiento de la nueva corporación.
La corporación preocupa a los ministros del gabinete de derecha que expresan que adoptará una postura editorial de izquierda. A finales de julio, la ministra de Cultura y Deporte, Miri Regev (Likud), expresó en una reunión de gabinete tempestuosa que la nueva corporación «debería tener un control absoluto del gobierno». Esta fue la primera vez en la historia del país que funcionarios gubernamentales expresaron abiertamente su voluntad de controlar de modo autoritario a los medios de comunicación.