“Nehama Vahezi”  un local con personalidad

8 noviembre, 2017 , ,

“Nehama Vahezi” es el curioso nombre de un restaurante y cafetería ubicado en una de las  esquinas mas importantes, céntricas y pobladas de Tel Aviv, frente al legendario “Habima Square” donde se halla una parte importante de la cultura  nacional: el Teatro Nacional  Habima y el Heijal Hatarbut, hogar de la Filarmónica Israelí.

Mafrum, albóndigas con cuscus

Además es la esquina que cubre el Boulevard Rothshild y la calle Ehad Haam.Un vecindario de los mas importantes, por ello no debe sorprender que en sus dos poblados sectores, se encuentren los actores y músicos más famosos, tomando tranquilamente el café o comiendo sus platos.  Heija

Vista al Kikar Habima

 

El menú incluye desayunos, ensaladas, sándwiches, pastas y otros platos, junto con el tradicional café y pastel.

Muchos comensales lo han elegido como uno de los mejores cafés de Tel Aviv, tanto por su  ubicación, como por su significado, al formar parte de la zona cultural mas importante del centro de la ciudad, cerca de muchos restaurantes, complejos culturales y atracciones para toda la familia.

Entradas

Sobre el restaurante nos informan que Momo es el dueño, lo abrió hace 13 años y desde su apertura es un éxito, el chef que lo acompaña desde entonces es Adam. Está muy bien ubicado en un edificio del Bauhaus y si bien el local pasó reparaciones, aún conserva armonía con el estilo internacional y con el diseño arquitectónico del Teatro Habima.

Postre

“Nechama Vahetzi” (significa un consuelo y medio) presenta un diseño urbano relajado con una terraza impresionante y espaciosa, en la que se ha dejado un árbol natural centenario. Esta dividido en dos locales, con el mismo menú. Pero en uno se fuma y en el otro no. Además uno sirve también para el expendio de pan preparado en el lugar.

La milanesa

Visitar el local es una experiencia recomendada. Probar su menú, que tiene de todo: un poco de italiano, un poco de marroquí, mucho del Mediterráneo, en desayunos, ensaladas, sándwiches, pasta y platos de verdad. Sin duda es un lugar no solo para comer sino que además para ver y ser visto. El ambiente es excelente y uno se puede sentir como si estuviera en un café en París. El servicio es atento pero eso depende de la hora. Desde la enorme terraza balcón se ve el movimiento del Habima. Los platos de más salida son la milanesa, y el “mafrum” que son albóndigas de carne especiales.

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