Un miembro del grupo terrorista chií Hezbollah prisionero del Organismo de Liberación del Levante -la alianza de la filial siria de Al Qaeda- pidió en un vídeo que los combatientes chiís detengan los combates en el noreste libanés y la zona fronteriza con Siria para salvar su vida.
En una grabación publicada en Telegram, el prisionero, identificado como Mohamed Mehdi Hadi, de la aldea de Chariyeh (sur), instó a Hezbollah a detener la operación que lanzó en la región libanesa de Arsal y en Al Qalamún Occidental (Siria) para expulsar a «terroristas».
«Si no se detiene la operación en la zona de Arsal y Al Qalamún Occidental, este va a ser el último mensaje en el que me verán y serán los últimos momentos de mi vida», aseguró en la difusión, dirigiéndose al grupo chií y a su familia.
Según confesó Hadi, lleva detenido por el Organismo de Liberación del Levante desde el 13 de noviembre de 2015.
«Espero de ustedes una respuesta rápida», ya que si no se detiene la contienda -insistió en el vídeo- «este será el último momento de mi vida».
La televisión libanesa LBC difundió otro vídeo en el que mostró a tres jóvenes supuestamente de las filas de Hezbollah, también prisioneros de la ex filial de Al Qaeda, en el que hacían la misma petición al grupo chií.
Hezbollah, apoyado por la aviación siria, lanzó una operación militar contra la ex filial de Al Qaeda en Siria en la región de Arsal, paralela a una lanzada por las fuerzas sirias en su lado de la frontera.
El grupo chií controla la mayor parte del territorio que ocupaba ese grupo jihadista en la parte sur del Líbano, pero aún existe un área muy amplia que está dominada por el Estado Islámico (EI) a ambos lados de la frontera. EFE