El Comité Ministerial Legislativo aprobó una ley para deducir a la Autoridad Palestina (AP) de los impuestos que recauda en su nombre Israel la parte que esta paga como salarios mensuales a los terroristas presos palestinos en cárceles israelíes y a sus familias.
La norma propone una reducción de mil millones de shekels (252 millones de euros) en la transferencia de impuestos a Ramallah, equivalente a lo que la AP paga a terroristas palestinos presos en Israel y a sus familias, según cálculos del Ministerio de Justicia.
Se trata de una propuesta del partido Yesh Atid y apoyada por miembros de la Knéset (Parlamento) tanto de la coalición gobernante como de la oposición y será presentada en breve a la Cámara para su aprobación.
Desde la visita del presidente estadounidense, Donald Trump a la región el mes pasado y sus públicas críticas al presidente palestino, Mahmud Abbás, por «financiar a terroristas», ha vuelto al debate político la cuestión de los pagos de «salarios» o ayudas a los palestinos involucrados en atentados contra civiles y soldados israelíes.
Yosi Kuperwasser, un oficial de inteligencia retirado y académico del Centro de Jerusalén para Asuntos Públicos, aseguró que el gobierno palestino destina el siete por ciento de su presupuesto anual a los pagos a los presos.
«Esa cifra, esos más de 200 millones de euros, es una cifra muy alta», indica Kuperwaser.
«Y no es lógico que los israelíes paguen al gobierno palestino para que éste a su vez pague salarios a quienes cometen actos terroristas contra israelíes y a sus familias», concluye el ex oficial de inteligencia.
El dinero que transfiere Israel a la AP es el producto de impuestos y tasas de aduanas recaudados por Israel en nombre de la AP en virtud de los acuerdos de Oslo de 1994. EFE y Aurora