El Ejército de Defensa de Israel (Tzáhal) anunció la intercepción con un misil Patriot de un avión no tripulado que despegó desde Siria en un intento por infiltrarse en el espacio aéreo israelí cruzando la Línea Bravo, sobre las Alturas del Golán. La Línea Bravo marca la frontera siria, lo que indica que el aparato ingresó en la zona desmilitarizada sin entrar en el territorio israelí.
El Ejército israelí precisó que el avión no tripulado pertenece a la organización terrorista islámica chií libanesa Hezbollah y que probablemente estaba llevando a cabo una misión de reconocimiento. El dron cayó en la zona desmilitarizada entre Siria e Israel. El portavoz militar, teniente coronel Jonathan Conricus manifestó que “El Ejército de Defensa de Israel no permitirá que nadie viole la soberanía israelí ni tampoco ningún intento hostil, de organizaciones tales como Hezbollah, la Jihad Islámica, las organizaciones terroristas iraníes y las milicias chiís, de dañar al Estado de Israel y sus ciudadanos, y responderá rápida y vigorosamente a cualquiera de esos intentos”. «El Ejército identificó un vehículo aéreo no tripulado que, según nuestro entendimiento, estaba operado por Hezbollah y era de fabricación iraní», aclaró el portavoz militar.
Conricus destacó que el dron había despegado del aeropuerto militar de Damasco y el Ejército de Defensa de Israel observó sus movimientos en lo que se cree que era una «misión de reconocimiento», hasta que «cruzó La línea Bravo en los Altos del Golán», momento en el que se decidió “interceptarlo con un misil Patriot». Los restos del dron habrían caído en algún lugar entre la localidades sirias de Al Ahmadiye y Quneitra por lo que las fuerzas israelíes no pudieron recuperarlo,