La Fuerza Aérea bombardeó varios blancos en la Franja de Gaza, en respuesta al disparo de proyectiles de mortero lanzado desde ese enclave -controlado por los islamistas palestinos-, que cayó en el sur de Israel.
El Ejército de Defensa de Israel (Tzáhal) precisó que aviones de combate atacaron tres blancos pertenecientes a la organización terrorista islámica Hamás, que gobierna Gaza con mano dura.
No se reportaron víctimas.
«En respuesta al ataque de un cohete, un avión de la Fuerza Aérea israelí alcanzó tres puestos de Hamás en el norte de la Franja de Gaza», indicó un parte militar que responsabiliza al grupo islamista de toda agresión que emane desde el territorio bajo su control.
El proyectil de mortero disparado desde Gaza cayó en un espacio abierto del Consejo Regional Eshkol, en el Negev occidental, sin provocar heridos ni daños materiales. Debido a que el sistema de alerta temprano identificó que el proyectil iba a caer en una zona despoblada, no activó las sirenas de alarma en la región.
El ejército responde habitualmente a los proyectiles lanzados desde el territorio controlado por los palestinos.
La última vez que un proyectil fue disparado desde Gaza fue el mes pasado, cuando un cohete lanzado por terroristas palestinos cayó dentro de la ciudad de Sderot, sin provocar víctimas.
En respuesta, Israel lanzó dos ataques contra la infraestructura de Hamás en la Franja. El primero fue de alcance limitado y en el segundo se efectuaron alrededor de cincuenta bombardeos contra “instalaciones estratégicas de Hamás”, según fuentes militares.
A veces los ataques con proyectiles de mortero y cohetes son perpetrados por grupos marginales sin la aprobación de Hamás y otras veces la organización islamista hace la vista gorda, según los analistas.