Imágenes tomadas por el satélite EROS B muestran la base militar iraní, que estaba siendo construida en Siria, tras el presunto bombardeo de la aviación israelí. La base está situada a alrededor de 50 kilómetros de la frontera con Israel, y las fotografías exhiben varios edificios destruidos.
Las imágenes provistas por la empresa satelital israelí ImageSat International, muestra la destrucción de siete estructuras edilicias en la base de al Kiswah, a trece kilómetros al sur de Damasco. Otros tres edificios fueron dañados. La mayoría de esas estructuras eran aparentemente barracas y garajes.
Numerosos medios árabes reportaron días atrás que Israel lanzó varios misiles contra la base.
La televisión estatal siria manifestó que la defensa aérea del país interceptó dos misiles israelíes disparados contra una “posición militar” en la provincia de Damasco y que el ataque produjo daños.
El canal Sky News en Árabe informó que los misiles fueron disparados por aviones de combate israelíes desde el espacio aéreo libanés.
Varios medios árabes reportaron que doce efectivos iraníes murieron en el ataque.
No hubo comentarios por parte de Israel.
Un canal afiliado al grupo terrorista libanés Hezbollah sostuvo que Israel disparó, en el ataque contra la base, dos misiles tierra-tierra Jericó 1 y que uno de ellos fue interceptado por el sistema de defensa aéreo ruso Pantsir-S1.
Analistas militares sostienen que es la primera vez que se informa de un uso operativo del misil balístico Jericó 1; y que se trata de un insólito reporte ya que Israel tiene varios tipos de misiles más adecuados para el rango requerido en un ataque de esa naturaleza.