David Sharan, ex jefe de Gabinete del primer ministro Biniamín Netanyahu fue identificado como uno de los sospechosos que la policía está tratando de convertir en testigo del Estado en el affaire de los submarinos, también conocido como el “Caso 3000”.
Sharan es uno de los seis sospechosos que fueron detenidos para un interrogatorio por sospechas de soborno en la compra de submarinos alemanes para la Marina israelí.
Un tribunal de Rishon Letzion extendió su arresto por cinco días después de que los investigadores lo identificaran como uno de los sospechosos que posee información clave sobre el asunto.
También fueron interrogados varios ex oficiales del Ejército de Defensa de Israel, entre ellos el ex comandante de la Marina, general (retirado) Eliezer Marom, y un ex comandante en la unidad de la élite Shayetet 13 (el comando marino). Éste último permaneció detenido. El secreto de sumario impide la publicación de su nombre.
Un portavoz de la policía dijo que se sospecha que los detenidos cometieron delitos financieros y éticos.
«Los seis fueron detenidos, y sus hogares y oficinas allanados con el objeto de incautar documentos relevantes para la investigación», precisó el vocero policial.
Otro de los sospechosos arrestados es el asesor estratégico Nati Mor a quien la policía atribuye delitos de soborno y la transferencia de dinero a un servidor público. Su arresto también fue extendido.
El testigo del Estado, Miki Ganor, (“garganta profunda”) proporcionó a sus investigadores testimonios detallados de los delitos que se presume que han cometido tanto en el caso de los submarinos y como en otros contratos en los que actuó como intermediario con el aparato de defensa, dando lugar a la reciente ola de detenciones.