El periódico Israel Hayom acumuló pérdidas

Según los registros internos del matutino gratuito
Los registros internos del periódico de tirada gratuita Israel Hayom revelaron por primera vez sus pérdidas acumuladas entre su fundación y 2014, calculadas en 730 millones de shekels (190 millones de dólares). Esto refleja una pérdida de aproximadamente un shekel por copia del papel impreso durante estos años.
Los datos también arrojan nueva luz sobre la importancia económica de operar el diario bien conocido por proporcionar una cobertura favorable del primer ministro Biniamín Netanyahu, y revela las enormes cantidades de dinero que el periódico perdió en sus primeros siete años para poder continuar.
La relación entre el dueño del periódico, el millonario estadounidense y magnate del casino Sheldon Adelson, y el primer ministro volvió a ocupar los titulares esta semana debido a la investigación policial sobre la posibilidad de que Netanyahu se hubiera movilizado para restringir la publicación de Israel Hayom a cambio de recibir una cobertura más amigable del diario rival Yediot Ahronot.
Israel Hayom fue fundado a mediados de 2007. Sus editores han sostenido constantemente que funciona de acuerdo con un modelo de negocio. “Hay un modelo de negocio y es un modelo ganador”, escribió Hezi Sternlicht, comentarista de economía del periódico en un artículo de opinión de 2014 que atacó los intentos de restringir su distribución a través del llamado proyecto Israel Hayom. “Israel Hayom fue construido y opera de acuerdo a un modelo económico, cuyo principio es la distribución gratuita y el crecimiento continuo de los ingresos publicitarios”.
El año pasado, la Freedom House de Estados Unidos, que rastrea las libertades civiles, degradó el status de libertad de prensa de Israel a “parcialmente libre”. Atribuyó el cambio de estatus al creciente impacto de Israel Hayom, “cuyo modelo de negocio subsidiado por el propietario puso en peligro la estabilidad de otros medios de comunicación y la expansión sin control de los contenidos pagos -algunos de los cuales fueron financiados por el gobierno- cuya naturaleza no estaba claramente identificada para el público”.