Cuatro nuevas startups recaudan 107 millones de dólares

La Startup Nation vivió importantes momentos los últimos días, más exactamente cinco grandes ofertas: Cuatro startups levantaron inversiones por 107 millones de dólares, entretanto una quinta compañía fue vendida en 300 millones de shékels (79.3 millones de dólares).
Las cuatro startups trajeron un capital de inversiones de dos dígitos, con la compañía de seguridad cibernética Claroty, después de dos años de operaciones ocultas anunció que habían recaudado 32 millones de dólares.
Luego, Cato Networks, un proveedor de seguridad de la red basada en la nube, informó que recaudó 30 millones de dólares. CTERA dijo que obtuvo 25 millones de dólares para ampliar su oferta de computación en la nube y OptiMove, otra startup de computación en la nube, manifestó que ingresó millones de 20 millones de dólares, la primera vez que obtuvo un capital de inversores externos.
Mientras tanto, los fondos de capital privado de Estados Unidos, Marlin Equity Partners, dijeron que adquirieron una participación de control en QualiTest de Israel, una compañía de pruebas de software, en una valoración de la compañía de 300 millones de dólares.
La avalancha de recaudación de fondos se produce en un momento de creciente preocupación por el auge de la alta tecnología, que se estima está empezando a retroceder. Un estudio publicado recientemente encontró que el número de inversiones de primera ronda en las startups había caído en la primera mitad de este año, por primera vez desde el 2011 hasta el 29%.
Las inversiones de primera ronda son un barómetro del apetito de los inversores por las startups de riesgo y aseguran que hay carteras de compañías para inversiones posteriores.
Claroty, que había estado operando en secreto durante los últimos dos años, dijo que recaudó sus 32 millones de dólares de los fondos Bessemer Venture Partners, de Estados Unidos, que administra el presidente de Google, Eric Schmidt – Marker LLC, Red Dot Capital Partners y Japan’s Mitsui & Company.
La empresa forma parte del Equipo 8, que fue fundado por Nadav Zafrir, ex jefe de la inteligencia militar de la unidad 8200. Sus productos proveen infraestructura crítica más segura en los sistemas de control industriales, tales como las redes eléctricas, fábricas de acero y refinerías de petróleo.