Continúa la tensión en torno al Monte del Templo de Jerusalén

Dectectores de metal instalados frente a la entrada al Monte del Templo Foto: Policía de Israel

La tensión en torno al Monte del Templo de Jerusalén, se mantiene por sexto día consecutivo, con fuertes medidas de seguridad y protestas palestinas contra los detectores de metal instalados en los accesos tras el ataque terrorista del viernes, que en el que fueron asesinados dos policías israelíes.

«Estamos preparados para cualquier situación posible, desde el ataque terrorista del viernes hemos incrementando las medidas de seguridad en la Ciudad Vieja de Jerusalén y desde hoy estamos trabajando en cooperación con el Ejército», dijo el portavoz de la Policía Micky Rosenfeld.

Pese a la tensión palpable en la zona, la convocatoria a un «Día de la Ira» por el movimiento Fatah, encabezado por el presidente palestino Mahmud Abbás, no ha tenido por el momento gran seguimiento, más allá de una manifestación en Ramallah a la que acudió alrededor de un centenar de personas.

Se espera otra protesta en el campo de refugiados de Qalandia, en Cisjordania (Judea y Samaria) entre Ramallah y Jerusalén, y muy cerca de un puesto de control militar.

El Ejército de Defensa de Israel valora que «en los últimos años los ‘Días de la Ira» no tienen la repercusión que tenían en el pasado y «han sido más de declaraciones simbólicas que órdenes a miles de personas para que salieran a las calles», según el diario Maariv.

Los grupos terroristas islámicos palestinos de Gaza, como Hamás y la Jihad Islámica, han instado a los países árabes e islámicos a intervenir para «defender Jerusalén».

El Monte del Templo fue cerrada durante quince minutos en el horario de visitas de público porque algunos visitantes «no siguieron las reglas», informó la Policía.

Se trató de un incidente con visitantes judíos que sacaron libros sagrados en el lugar, donde de acuerdo al status quo de cincuenta años, está prohibido el rezo no musulmán.

La violencia continuó anoche en el barrio árabe de Silwán, en Jerusalén este, donde decenas personas se manifestaron contra los detectores de metales colocados por las autoridades israelíes a la entrada del Monte del Templo y, según la Policía, se enfrentaron a las fuerzas de seguridad con piedras, bombas incendiarias y petardos.

La radio estatal informó que en el enfrentamiento con la policía resultaron heridas docenas de manifestantes.

Es el cuarto día de violencia por la instalación de las nuevas medidas de seguridad en uno de los puntos más explosivos de la región.

Las autoridades islámicas han pedido a los fieles que no acudan a rezar dentro del recinto, en señal de protesta, y decenas se congregan a las afueras del mismo durante todo el día para mostrar su rechazo.

El Monte del Templo es el lugar más sagrado para el judaísmo, y tiene a sus pies el principal lugar de oración judía, el Muro Occidental o Kotel Hamarabí (conocido en el mundo gentil como el Muro de las Lamentos). Sobre el mismo, estaban erigidos los dos Templos bíblicos hebreos destruidos por los babilonios y romanos. Siglos más tarde, los musulmanes erigieron sobre el lugar sagrado la mezquita de Al Aqsa y la Cúpula de la Roca. La mezquita de Al Aqsa es el tercer lugar más sagrado para el islam. EFE y Aurora

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