Comienza la batalla de los palestinos contra Trump

29 noviembre, 2017 , ,

Por Bassam Tawil

Durante el último año, los palestinos lograron mantener ocultos sus verdaderos sentimientos hacia el presidente Donald Trump, sus enviados y asesores en el Oriente Medio. Es probable que hubiesen esperado que la administración estadounidense respaldara su visión de paz con Israel.
Los altos mandos de la AP en Ramala consideraron que sería conveniente darle tiempo al presidente de los Estados Unidos para ver si era posible persuadirlo de sacar a Israel de circulación y así, terminar con sus demandas.
Los palestinos ahora se encargan de denunciar a Trump y a su gente por la parcialidad empleada a favor de Israel. Aún más, los palestinos acusan abiertamente a la administración Trump de chantaje y objetan que están tratando de terminar con la causa palestina, para colmo, los palestinos insinúan que los principales asesores y enviados judíos de Trump; Jared Kushner, Jason Greenblatt y David Friedman, son más leales a Israel que a Estados Unidos.
Los ataques retóricos sin precedentes de los palestinos a la administración Trump deberían verse como una señal de cómo planean responder al plan del presidente estadounidense para la paz en el Medio Oriente, que ha sido descrito como la “solución definitiva”. Aunque los detalles completos del plan propuesto aún no se han hecho públicos, los palestinos ya han tomado una decisión: lo que provenga de Trump y su equipo judío va en contra de los intereses de los palestinos.
Para los palestinos el “verdadero” plan de Donald Trump es ahora aparente, de este modo un analista político palestino, el Dr. Mazen Safi, reaccionó ante el plan de paz propuesto y lo que percibe como el continuo apoyo de Estados Unidos a Israel: “El presidente de los Estados Unidos y su administración se han quitado la máscara. Ellos están allanando el camino para una nueva agresión israelí hacia nuestra gente y movilizando a la región hacia una explosión”.
Los palestinos afirman que la paz entre Israel y los países árabes deberían venir, después y no antes, de resolver el problema palestino, ellos temen que estos arreglos lleguen a costa suya.
Haciéndose eco de este temor, el diario palestino Al-Quds, que refleja los puntos de vista de los líderes de la AP destacó que el encuentro de ministros extranjeros de la Liga Arabe en el Cairo se enfocó en la amenaza Irán y Hezbollá y no dudaron en clasificar a este último como grupo terrorista, saliendo de la tradicional obsesión árabe del problema palestino, por lo cual los palestinos, se sintieron abandonados por sus hermanos árabes. Luego este mismo medio expresó que el plan propuesto por Trump no sirve a los intereses y aspiraciones palestinas.
En segundo lugar, los palestinos están furiosos con las amenazas estadounidenses de cerrar la misión diplomática de la OLP en Washington. Ellos ven esta amenaza como una tentativa de chantaje para que no presenten cargos por crímenes de guerra contra Israel ante la Corte Penal Internacional. También lo ven como un intento de obligarlos a reiniciar las conversaciones de paz con Israel incondicionalmente.
Tercero, los palestinos hablan en la actualidad abiertamente de los enviados y asesores judíos de la administración estadounidense y su influencia sobre la política a seguir. Esto es algo que los oficiales de la AP se abstuvieron de mencionar el año pasado porque sonaba a antisemitismo. Ahora, sin embargo, los oficiales palestinos y los analistas políticos no tienen ningún inconveniente en hablar sobre la influencia del “lobby judío” en la toma de decisiones de Donald Trump.
Hassan Al-Batal, un analista político estrechamente asociado a la AP, en un artículo reciente lo llamó “los tres pilares del plan de la paz de Trump – el yerno, Kushner; el enviado de Oriente Medio, Greenblatt; y el Embajador de Estados Unidos en Israel, Friedman”.
Baram Abu Sharif, ex asesor de Yasser Arafat, llegó incluso a referirse a los asesores judíos de Trump como una “camarilla peligrosa”, dijo que no tiene ninguna duda de que lo que Kushner y su clan están planeando es destructivo e inhumano. EE.UU. acusó, tiene un objetivo principal, tomar el control de Oriente Medio y robar sus recursos de una vez por todas. Este paso requiere según su esquema la liquidación de la causa palestina.
Otro analista político, Talal Okal, que también vinculado con la Autoridad Palestina y sus líderes, acusa a Trump de desinformación e intento de chantaje a los palestinos. Refiriéndose a la demanda estadounidense de que los palestinos se abstengan de presentar cargos contra Israel ante la Corte Penal Internacional y la amenaza de cerrar la misión diplomática de la OLP en Washington, escribió “La administración estadounidense está chantajeando a los líderes palestinos al exigir que realicen negociaciones incondicionales con Israel y que se abstengan de perseguir crímenes de guerra contra Israel con la Corte Penal Internacional. Es obvio que la administración Trump está practicando una política de desinformación.”
El analista político Hani Habib afirmó que la administración Trump se está preparando para culpar a los palestinos del fracaso del tratado de paz. Afirma que los palestinos deben estar unidos para enfrentar todas las formas de chantaje norteamericano-israelí.
El columnista Omar Hilmi Al-Ghul en un artículo titulado “El chantaje barato estadounidense”, escribió que la administración estadounidense una vez más ignora los derechos e intereses palestinos. En forma desvergonzada y flagrante busca confiscar la toma de decisiones independiente de los palestinos.
Esta teoría conspirativa, que afirma que el grupo Trump se preocupa más por los intereses de Israel, se repite en una declaración de Fatah: “El chantaje político estadounidense contraviene las leyes y resoluciones internacionales pertenecientes a la cuestión palestina en particular y al proceso de paz en general. Esta posición estadounidense respalda la política israelí de poner fin a la solución de dos Estados.
Los ataques retóricos de los palestinos a la administración Trump están diseñados para preparar el terreno para rechazar la propuesta a la solución definitiva. Los palestinos quieren que se lo vea como un plan ideado por funcionarios judíos en la administración que son más leales a Israel que a su propio país. Por eso, no pueden aceptar un plan que en realidad es una conspiración judío-estadounidense para eliminar la causa palestina.
Los palestinos están preparando también la etapa para acusar a algunos países árabes de colusión con esta conspiración, poniéndolos en una colisión en curso con Arabia Saudita.
El mensaje palestino a los países árabes, especialmente a Arabia Saudita, debe verse como una advertencia: “Colaborar con la administración Trump en el presunto plan es bajo propia responsabilidad”. La postura anti-Trump palestina suena como una sentencia de muerte para los esfuerzos de la administración estadounidense para lograr la paz global en el Oriente Medio. Tome nota: estos tiros de advertencia pueden ser traducidos en otra Intifada contra Israel bajo el pretexto prefabricado de que los israelíes y los norteamericanos, con la ayuda de algunos países árabes, buscan despojar a los palestinos de sus derechos. Y aquí cabe preguntarse cuando el mundo va a despertarse al hecho que esos derechos ya han sido despojados de los palestinos, por nada menos que su propio lavado de cerebro, efectuado por sus corruptos e incitadores líderes.
Fuente: Gatestone Iinstitute.■

Compartir
Subscribirse
Notificarme de
guest
7 Comentarios
Inline Feedbacks
Ver todos los comentarios