Las Fuerzas de Defensa de Israel instruyeron a los residentes con una serie de medidas de seguridad a raíz del intenso fuego de cohetes y proyectiles de mortero disparados hacia Israel, por parte de grupos terroristas.
A pesar de que inicialmente autorizaron acampar en únicamente en zonas protegidas, las FDI cambiaron las instrucciones en horas recientes, cancelando todas las actividades.
Las actividades en instituciones académicas también fueron canceladas, al mismo tiempo que se impidió que los agricultores trabajaran en campo abierto.
Agregado a estas medidas de seguridad, se requirió a los residentes del área permanecer cerca de los refugios antibombas. Todo tipo de reunión multitudinaria fue expresamente prohibida.
Por el momento, se permite a las oficinas gubernamentales y a las empresas privadas operar con una capacidad limitada.
Las Fuerzas de Defensa de Israel anunciaron que no circularían trenes entre la ciudad fronteriza de Sderot y la ciudad costera de Ashkelon y la playa Zikim permanecerá cerrada, por el momento.
Después de los ataques desde Gaza, el primer ministro Biniamín Netanyahu y el ministro de Defensa, Avigdor Lieberman se reunieron durante la noche con altos oficiales de las FDI y otros servicios de seguridad en la sede del ejército en Tel Aviv, para analizar la situación y decidir sobre un curso de acción.
Las sirenas sonaron en las comunidades israelíes durante toda la noche, y miles de familias durmieron en refugios antiaéreos y espacios protegidos.