Un hombre palestino juzgado en febrero por asesinar a su novia israelí Michal Halimi de 29 años, embarazada, recibió una condena de cadena perpetua por asesinato más otros cinco años por diferentes delitos cometidos.
Además, la Corte de Distrito de Tel Aviv ordenó a Harouf, residente de Nablus, pagar la indemnización de 258.000 shekels a la familia Halimi.
Mohammed Haruf confesó los cargos en su contra y fue condenado como parte de un acuerdo por motivaciones nacionalistas a pesar de que la acusación original carecía de tales cargos, habiéndose estimado atribuciones personales.
Harouf fue arrestado en agosto bajo sospecha de haber asesinado a Halimi de Geva Biniamin, quien despareciera el 23 de mayo, y cuyo cuerpo fue encontrado cerca de la ciudad de Holón, el 24 de julio.
Mohammed Haruf estranguló y golpeó a Halimi con una roca en la cabeza, para luego cubrir su cuerpo con arena y hojas antes de abandonar el lugar en el vehículo de la víctima. La corte lo sentenció por el crimen, por haber robado el vehículo, por conspiración para cometer un delito, intento de fraude utilizando una tarjeta de débito y entrar ilegalmente a Israel.
La policía inició una investigación luego de la desaparición de la mujer que reveló que había dejado su casa en forma voluntaria y que se alojaba en la casa de un joven palestino de Nablus con quien ella estaba involucrada. Los dos publicaron fotos juntos en Facebook y anunciaron su intención de comprometerse.