El diputado David Bitan, del partido Likud, le pidió al primer ministro, Biniamín Netanyahu, que lo relevara de su rol como presidente de la coalición en el contexto de una investigación policial en su contra por presunta corrupción.
Bitan explicó en un comunicado que quería renunciar a su cargo “debido a la situación actual que me dificulta hacer mi labor y no quiero estorbar el trabajo de la coalición”
Bitan agradeció al primer ministro por “la confianza y el apoyo” que todo el tiempo le depositó. “Continuaré sirviendo con gran honor como diputado del partido Likud y haré todo lo que esté a mi alcance para seguir representando al público que puso su confianza en mí».
Bitan es sospechoso de soborno, fraude, lavado de dinero, abuso de confianza y de recibir cohecho a cambio de promover los intereses de terceros, incluyendo de un miembro de la familia Jarushi del presunto crimen organizado, a cambio de que le pagaran las deudas que tenía con usureros.
La policía está tratando de reclutar a uno de los dos sospechosos en el caso y convertirlo en testigo del Estado. Una opción es Moshe Yosef, un empresario apodado el «banquero» de Bitan. El otro es el constructor Dror Glazer, sospechoso de haber otorgado a 250 mil shekels en calidad de cohecho a Bitan.
Bitan será reemplazado como presidente de la coalición por el diputado David Amsalem, también del partido Likud