El ministro de Exteriores de Brasil, Aloysio Nunes, declaró en Tel Aviv que entre Israel y Brasil «puede existir una relación mucho mayor de la que hay ahora» y que ambos países «tienen un gran futuro por delante».
«Las posibilidades de cooperación con Israel son incontables y enormes y podemos hacer mucho más de lo que estamos haciendo hoy», afirmó Nunes en su segundo día de visita en Israel, tras intervenir en el Centro Cultural Brasileño de Tel Aviv, fundado en 2013 por el presidente del país sudamericano, Michael Temer.
El mandatario conoció las instalaciones de este centro de divulgación de Brasil junto el embajador en Israel, Paulo César Vasconcellos, y el presidente de la Confederación Israelita de Brasil (Conib), Fernando Lottenberg, entre otros.
Nunes visitó la planta de desalinización de Ashkelon, en el suroeste del país, donde aseguró haberse quedado sorprendido «de la capacidad de invención» del Estado israelí.
«Es interesante cómo fue hecho; el secreto es la mezcla entre diferentes componentes y tecnologías que buscaron en diferentes lugares del mundo para crear algo nuevo», valoró.
El ministro de Exteriores aseguró que el mayor intercambio entre los dos países actualmente es en materia de defensa y mostró su interés por ampliarlo a otros sectores, como acordó en su encuentro con el primer ministro, Biniamín Netanyahu.
«Estimular las inversiones israelíes en Brasil y su exportación después a Israel. Lo que es necesario es que los empresarios de los dos países se conozcan más», planteó sobre el compromiso entre los dos mandatarios de profundizar en «tecnología, seguridad cibernética y agricultura».
El canciller hizo referencia al acuerdo alcanzado entre las dos legaciones diplomáticas para que tanto israelíes en Brasil como brasileños en Israel dispongan de un seguro social.
«Hay una enorme simpatía en Brasil por Israel y creo que viceversa», comentó sobre los avances que se han logrado con esta visita.
En sus relaciones con la Autoridad Palestina, adonde viajará mañana y será recibido por el presidente palestino, Mahmoud Abbás, Nunes apostó por incidir en la cooperación y descartó que Brasil pueda postularse como mediador «por iniciativa propia» en el conflicto con Israel.
«Nuestro poder está en otras formas de actuación. Tenemos una tradición de buscar negociaciones, pero solo si fuéramos invitados por las dos partes», aseveró.
«Brasil tiene una posición sobre este conflicto ya establecida hace años que no varía con independencia del Gobierno, sea más de izquierdas o de derechas, y que consiste en buscar una solución pacífica y negociada que garantice la existencia de dos Estados, pacíficamente y con fronteras seguras», dijo.
Con respecto al polémico traslado de la embajada de EEUU a Jerusalén, anunciado para este 14 de mayo, Nunes prefirió no pronunciarse sobre «decisiones soberanas», al tiempo que defendió «que la situación de Jerusalén debe ser definida a través de una negociación que posibilite la existencia de dos Estados y también el libre culto de los fieles de las tres grandes religiones».
Nunes comenzó su agenda oficial en el Museo del Holocausto (Yad Vashem) de Jerusalén y también se encontró con el presidente, Reuven Rivlin, de quien aseguró de forma distendida que «habló con mucha entidad de dos craks del fútbol, Pele y Maradona, como alguien que entiende de este deporte».
Mañana continuará con encuentros oficiales en Cisjordania, donde también se espera que sea recibido por el primer ministro de la AP, Rami Hamdallah. EFE