Según informes de la Organización Mundial de la Salud, aproximadamente 65 millones de personas en el mundo necesitan sillas de ruedas. De ellos, alrededor del 25% son niños que, en consecuencia, tienen dificultades para integrarse a la rutina escolar formal.
En el mundo entero, las sillas de ruedas tienen un costo bastante elevado que a menudo es difícil de cubrir para familias de bajos recursos. Por esto, el empresario israelí de origen argentino Pablo Kaplan y su esposa Chava Rotshtein, fundaron Wheelchairs of Hope. Esta organización busca crear sillas de ruedas de bajo costo (100 dólares) que permiten a niños provenientes de familias de bajos recursos a tener una mayor movilidad, seguridad y poder acceder al sistema educativo.
Esta semana, gracias a la donación de la familia israelí Hasbani de Milano, fueron entregadas 270 sillas de ruedas para niños de Colombia. La entrega fue realizada en colaboración con la embajada de Israel en el país y serán distribuidas en cooperación con la fundación Teletón y otras fundaciones aliadas.
En un comunicado difundido por la embajada de Israel en Colombia afirmaba que «el Ministerio de Relaciones Exteriores de Israel, a través de su Embajada en Colombia, pretende seguir fortaleciendo los lazos de amistad con este país hermano. Es por esto que para el Estado de Israel es de suma importancia compartir con el mundo sus desarrollos e innovaciones, sobre todo cuando estas contribuyen a la salud y bienestar de los niños».
Es una pena que un pais hecho por y para refugiados, quiera expulsar a quienes buscan refugio. Es triste el giro a la derecha que se observa en Israel de un tiempo a esta parte.